Ya falta poco para reencontrarnos, para que de nuevo la Euskal Denda ponga la artesanía en el corazón de todos los visitantes de esta 22 edición. Para hacerlo realidad y posible, durante todo el fin de semana hemos estado trabajando para convertir la plaza del mercado de Durango en nuestra pequeña ciudad del arte. Unos días duros pero que han merecido la pena. El resultado lo veréis con vuestros propios ojos el miércoles a las once de la mañana.Entre tanto seguiremos trabajando para que nuestro objetivo de difundir y profundizar en el fomento y también la comercialización de la artesanía, con el sello de haber sido realizada en Euskal Herria se haga realidad. Por todo ello, esta es una ocasión sin igual para que el público conozca el trabajo en vivo del artesano, cuestión más que necesaria para descubrir a estos profesionales.
La artesanía se puede entender como una forma de vida, pero también
sirve para fomentar los valores culturales de nuestro país, sin
olvidar su aporte al desarrollo económico del país y su valor en el
mantenimiento de oficios, que si no fuera por los artesanos no
sobrevivirían en el tiempo.
